Un grupo de residentes de Pampas de Jaguay – La Rinconada, damnificados por la actividad del volcán Ubinas, ha alzado su voz contra el Gobierno Regional de Moquegua, acusándolo de llevar a cabo un desalojo sin previo aviso que resultó en la destrucción de sus hogares y la pérdida de pertenencias.
Según los testimonios de los afectados, al regresar de sus labores cotidianas, se encontraron con un panorama desolador: sus viviendas derribadas, sus cultivos arrasados y sus tanques de agua desmantelados. Denuncian que no recibieron ninguna notificación previa por parte de las autoridades sobre esta acción.
«Llegamos y vimos nuestras casas destruidas, todo lo que teníamos, nuestras plantas, todo», declararon a una conocida emisora local.
Los damnificados también denunciaron que personal municipal habría sustraído materiales y objetos personales durante el desalojo, aumentando la sensación de vulnerabilidad e indignación.
Los terrenos en cuestión fueron asignados a estas familias tras la emergencia provocada por el volcán Ubinas, contando con la verificación de la jueza de San Antonio y certificados emitidos por el exalcalde de Ubinas, Pascual Coaquira, que acreditaban su derecho a residir en la zona.
Ante esta situación, los damnificados exigen una explicación por parte del GORE Moquegua y solicitan la reconstrucción inmediata de sus viviendas, así como una investigación sobre las denuncias de sustracción de bienes.
