POR: CÉSAR A. CARO JIMÉNEZ
En mi anterior artículo escribí sobre la primera oferta de compra del grupo anglo australiano BHP, –la mayor empresa minera del mundo–, que ofreció en ese momento por la también empresa británica Anglo American, 31.100 millones de libras (unos 36.000 millones de euros) en acciones, la cual fue rechazada por el directorio de Anglo American, al igual que otras dos ofertas más, siendo la última la del 20 de mayo la cual ofrece que por cada acción de propiedad de Anglo American, los accionistas de Anglo American recibirían: 0,8860 acciones de BHP; y Acciones ordinarias de Anglo American Platinum Limited y de Kumba Iron Ore Limited (distribuidas por Anglo American a sus accionistas en proporción directa a la participación efectiva de los accionistas de Anglo American en Anglo American Platinum Limited y Kumba Iron Ore Limited).
Significa que esta tercera oferta valora los activos de Anglo American en 49,200 millones de dólares, equivalentes a 38, 600 millones de libras esterlinas, ofrecimiento que una vez más ha sido rechazado por la Junta Directiva por unanimidad, dando lugar a que Stuart Chambers, presidente de Anglo American, comentará que “la última propuesta de BHP nuevamente no reconoce el valor inherente a Anglo American, pero sin embargo, la Junta está dispuesta a seguir colaborando con BHP y sus asesores sobre este tema y, por lo tanto, ha solicitado una extensión de una semana al plazo del PUSU, lo cual significa que el nuevo plazo se vencerá a las 5:00 p.m. del 29 de mayo de 2024, hora de Londres”; fecha en la cual BHP deberá presentar lo que se conoce como una oferta hostil (Hostil Take Over), que de ser favorable a los accionistas, el directorio tendría que aceptarla. Y cuidado, que puede aparecer una tercera empresa interesada en hacer otra suculenta oferta, lo que esbozaremos más adelante.
Ahora bien, cabe intentar encontrar una respuesta a todos estos movimientos de índole tanto político como económico y para ello recurrimos tanto a Adam Smith como a Marx el economista que tuvo y/o tiene muchos aciertos en sus análisis, muy por el contrario del político que puede decirse que se equivocó en muchas ocasiones, como a un buen amigo y mejor profesional como es Andrés Franco Longhi.
Y aquí cabe también recordar y preguntarse, en cuánto estará valorizada Quellaveco en los esquemas tanto de Anglo American como de BHP Billiton, , sobre todo recordando que fue adquirida por tan solo 12 millones de dólares, lo que le ha permitido una apreciable acumulación de capital a Anglo American en activos y bienes de capital, como maquinaria, equipos y tecnología, que a su vez han conducido a un aumento del valor total de sus activos, aparte del aumento en la producción y productividad de Anglo American, factores que tienen un indudable peso en las actuales negociaciones.
La acumulación del capital ha sido un tema de debate y controversia a lo largo de la historia económica. Tanto Adam Smith como Karl Marx señalaron la preocupación por la concentración del capital en pocas manos y sus consecuencias en la sociedad.
Adam Smith, considerado el padre de la economía moderna, enfatizó en su obra “La Riqueza de las Naciones” la importancia de la competencia y la libre empresa como motor del desarrollo económico. Sin embargo, también advirtió sobre los peligros de la acumulación excesiva de riqueza en manos de unos pocos individuos, lo que podría llevar a la explotación de los trabajadores y a una desigualdad creciente en la sociedad.
Por otro lado, Karl Marx, en su obra “El Capital”, desarrolló una teoría crítica del sistema capitalista en la que identificó la acumulación del capital como el motor principal de la explotación de la clase trabajadora. Para Marx, la propiedad privada de los medios de producción y la concentración del capital en manos de una élite empresarial conducían inevitablemente a la alienación y la desigualdad social.
Ambos autores coinciden en que la acumulación del capital en pocas manos puede tener efectos negativos en la economía y la sociedad en general. La concentración de la riqueza en un pequeño grupo de personas puede generar desigualdad, injusticia y limitar las oportunidades para el resto de la población y en este caso para el mundo entero, tal y como lo señala Andrés: “El cobre está garantizado. Rusia sigue encontrando reservas de petróleo, sin el cambio de energías, –que se prevé recién para los próximos 10 años–, por lo que es posible que con el ánimo de evitar que China y Rusia lideren las políticas monetarias, teniendo en consideración que se esperan buenos precios de cobre los próximos 30 años, el BHP debe querer liderar y tener el poder de la oferta del cobre para jugar a precios altos… es decir, va pagar por las acciones de Anglo más de lo que valen realmente hoy, para tener el manejo de la oferta, –la demanda está garantizada–, lo que le permitirá de acuerdo a sus intereses aumentar o bajar la producción y por consiguiente los precios, recuperando lo invertido a corto plazo”.
Lo que me lleva a pensar en otra posibilidad en la actual lucha mundial por la acumulación de capital: en el factor China, un estado con una dirección única centralizada a través de un partido que se autodenomina comunista y que hábilmente está utilizando las normas económicas occidentales para comprar y/o controlar poco a poco los recursos naturales y a muchas empresas del mundo, la cual muy bien puede presentar una oferta para adquirir Anglo American, muy superior a la de BHP Billiton, considerando que es el país con más reservas en moneda extranjera, que constantemente están en aumento y actualmente alcanzan los US$3,44 billones.
Esto es US$ 3.440.000.000.000, con todos los ceros, o básicamente el valor de toda la economía alemana, creyéndose que la composición de las reservas de divisas está constituida en un 65% en dólares estadounidenses, 26% euros, 5% libras esterlinas y 3% yenes.
Por lo que no es de descartar que China pueda interesarse y hacer una oferta en el ámbito de las reglas capitalistas, tal y como en su momento en nuestro caso se posesionaron en Marcona, Las Bambas y Toromocho por citar algunas…y lamentablemente, repito, que si bien es cierto que el desenlace aún no se puede prever, al estar en juego la propiedad de Quellaveco, sería interesante o muy conveniente que las autoridades tanto nacionales como regionales busquen los mecanismos legales y/o económicos para evitar que se repita la historia: que se transfieran la propiedad de Quellaveco a otro dueño, sin que el Estado ni la región se beneficien con un centavo.