POR: NOLBERTO ARATA HURTADO
Este pasado fin de semana, en la celebración del bicentenario fundacional republicano del I.E.E. Simón Bolívar, antes La Libertad, Gran Unidad Escolar Simón Bolívar, he tenido muchas emociones motivadas por el reencuentro con compañeros de estudios y amigos que no veía muchísimos años, tan es así que a algunos les tenía que decir: — Perdona, ¿tú quién eres? Y a la respuesta venía la contundencia del abrazo y luego la “chapa” con la que se le recordaba esos años.
Digo atadito de recuerdos porque ahora guardo estos momentos amarraditos en lo mejor de mí con una cinta roja junto a mi corazón.
Imagino que esa misma emoción y sentimiento la habrán experimentado muchos y muchas, porque me encontré con personas que regresaban a Moquegua desde algunos lugares de nuestro Perú o del extranjero, por ejemplo, Estados Unidos, España, Italia, etc., después de muchos años, algunos desde que habían terminado los estudios y que también querían sentir la emoción del reencuentro con los amigos de la niñez y juventud.
El sábado hubo la reunión en El Naranjal, en que bebieron y bailaron como en los tiempos juveniles, y el raudal de recuerdos y anécdotas bloqueaban la noción del tiempo y de pronto era madrugada.
El domingo, día del desfile, fue otro cúmulo de emociones: encontrarse con los amigos que habían estado delicados y ahora recuperados estaban presentes, aunque en silla de ruedas, pero felices de compartir el momento tan importante y dando gracias a Dios por haberles recuperado su salud.
Personalmente tenía programado desfilar en mi promoción de 1964 con, entre otros, el “Gringo” Walter Valdivia, Víctor Casanova, el “Chueco” Freddy Maldonado, Julio Vélez, Luis Alberto “Caimán” Sánchez, José “Cheché” Sánchez, Alfredo Liu, Carlos Hilasaca, Carlos Chávez B., con quien el día anterior habíamos estado coordinando el diseño y hacer el banner de nuestra promoción “Luis E. Kuon Cabello”. También en hacer el banner identificatorio de la promoción Bodas de Diamante, es decir, de quienes hacía 75 años habían terminado sus estudios en el año 1950 en el colegio La Libertad.
Cuando estábamos prestos a iniciar el desfile, Enrique Corrales Pinto, el alumno representante, nos pidió que junto con Freddy Maldonado lo acompañásemos, y así fue. El momento y acto fue muy emocionante e interesante sentir los aplausos y gritos del público hacia Enrique, que era el alumno decano y promoción estrella del desfile, y un honor especial acompañarlo en tan significativo evento.
Después de las entidades y grupos profesionales que se aunaron a la celebración bicentenaria, desfilaron los alumnos del colegio y de las delegaciones visitantes de los colegios de fundación bolivariana de Puno, Cuzco, Arequipa, Bolivia. Enrique Corrales, de la promoción Bodas de Diamante, luego las promociones de Bodas de Oro, Bodas de Plata, y desde la más antigua hasta la más reciente.

En muchas promociones estaban incorporadas mujeres, como lo hubo antes en el colegio La Libertad, que dejó de ser mixto al crearse el colegio Santa Fortunata.
Lo anecdótico fue que muchos recuperaron el antiguo uniforme único, desfilando de plomo y otros con el uniforme kaki. Uno de mis compañeros quiso estar de kaki, pero no se dio cuenta que el uniforme era de cuando era joven, atlético y delgado, y ahora gordo ya no cabía en él.
Quiero terminar esta nota mencionando que hicimos recuerdo de los compañeros que han partido al lado de Nuestro Dios, en especial de Arnaldo Vargas y Freddy Zapata. También con mi sincero agradecimiento a los abrazos y palabras que han traído a mi memoria alegría con historias, anécdotas, bromas, apodos, que han reverdecido mi alma.
