Moquegua se prepara para una paralización regional programada para el 14 de agosto, en rechazo al proyecto Huatipuka, promovido por la empresa Tower and Tower. La decisión fue tomada en una asamblea amplia realizada en el auditorio de la Municipalidad Distrital de San Antonio, donde participaron dirigentes sociales, autoridades locales y representantes de la sociedad civil.
El dirigente Óscar Zeballos, denunció que los informes presentados por los técnicos locales —que alertaban sobre los riesgos ambientales y de salud— fueron desestimados por el Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las Inversiones Sostenibles (SENACE), en lo que calificó como un acto de negligencia y subordinación a intereses empresariales.
Entre los acuerdos alcanzados figura la exigencia al Gobierno para destituir a la directora del SENACE, reestructurar su equipo técnico, y revisar a fondo el informe emitido por el ANA (Autoridad Nacional del Agua), que validaba el acceso a recursos hídricos por parte de la empresa.
No obstante, esta última afirmación quedó desmentida oficialmente por la EPS Moquegua mediante un comunicado emitido el 5 de agosto, donde se aclara que no existe convenio ni autorización alguna para la venta de agua a Tower and Tower. Este hecho, según Zeballos, “derriba el sustento legal del informe del ANA y deja sin piso técnico la aprobación del proyecto”.
PARO POR CONTAMINACION RIO CORALAQUE
Además del caso Huatipuka, la jornada de protesta incluirá otros reclamos pendientes como la contaminación del río Coralaque y la denuncia del recorte presupuestal del canon minero que afecta al gobierno regional y municipalidades locales. “Mientras más aporta Moquegua, menos recursos recibe. Es un despropósito”, manifestó el dirigente.
Indicó que, para asegurar una movilización de gran impacto, se han conformado comisiones que coordinarán con distintos sectores sociales: transportistas, sindicatos, comerciantes de mercados, docentes, estudiantes y agricultores. Se prevé el cierre del puente Montalvo y otras vías estratégicas de ingreso a la ciudad.
“La población tiene que participar, no solo como protesta, sino como defensa de su derecho a vivir en un ambiente sano. No podemos permitir que Moquegua sea el basurero industrial de la zona sur del país”, enfatizó Zeballos.