Durante la actual temporada de verano, las caletas de Quebrada Honda y Centeno en la jurisdicción de la provincia de Islay han sido identificadas como puntos de gran afluencia turística.
Ante esta situación, el alcalde de la Municipalidad Distrital de Islay-Matarani, Irwin Santoyo Chalco, ha manifestado su propósito de brindar la mejor cobertura en materia de seguridad, aunque lamenta que la controversia territorial con la provincia de Camaná dificulta las intervenciones necesarias.
En sus declaraciones, Santoyo subrayó que “queremos hacer arreglos, pero recordemos que hay un acuerdo de la mesa de diálogo de ordenamiento territorial que impide invertir y actuar para hacer mejoras de los servicios en dichas caletas”.
Este obstáculo legal ha dejado al municipio de Islay con las manos atadas, lo que limita la capacidad de implementar mejoras significativas en la infraestructura y servicios necesarios para los veraneantes.
RESCATE Y LIMPIEZA
A pesar de estas limitaciones, el municipio ha asignado personal de salvataje que opera todos los días, garantizando así la seguridad de los visitantes en las playas. Estos rescatistas cuentan con transporte y alimentación, gracias a un convenio establecido con la Policía Nacional del Perú. Además, se ha desplegado un equipo responsable de la limpieza de las caletas y se ha instruido a los comerciantes sobre la correcta gestión de sus actividades.
COORDINACIÓN CON CAMANÁ
El alcalde también destacó la importancia de establecer una coordinación efectiva con las autoridades de Camaná para poder articular esfuerzos entre ambas municipalidades. Santoyo expresó su deseo de entablar un diálogo constructivo con el objetivo de mejorar los servicios ofrecidos a los veraneantes.