Los miembros de la comisión especial que llevaba adelante el acto de subasta para la concesión de espacios públicos en las playas de Mollendo, decidieron suspender el desarrollo de la misma al generarse agresiones entre los postores en el interior de la Estación Cultural.
Si bien los primeros procesos se desarrollaban con cierta normalidad, en el exterior del local existía un ambiente de tensión entre algunos comerciantes de playas que no podían participar debido, entre otras cosas, aseguraron, al elevado precio base que pretendía cobrar la Municipalidad Provincial de Islay (MPI) por lo que se habría dado preferencia a inversionistas foráneos.
Llegado un momento y mientras se hacían los protocolos para la concesión, un varón que estaba ubicado en la zona del público empezó a hablar en voz alta a otro postor. El director de la comisión advirtió que la subasta se podía suspender si continuaba el desorden.
A pesar del aviso, el hombre arremetió contra su víctima y tuvo que intervenir personal de serenazgo que más allá de reducirlo o aislarlo del lugar, permitió que el sujeto continúe lanzando improperios dándole finalmente un golpe de puño en el rostro. Los serenos procuraron controlarlo con ayuda de la policía.
En medio del tumulto, una mujer se acercó al agredido produciéndose nuevamente la gresca. A ello se sumó el ingreso masivo de los comerciantes que se encontraban en las afueras de la Estación Cultural produciéndose el caos de la situación, por lo que la comisión de subastas decidió suspender el acto.
Finalmente, luego de unos minutos personal de serenazgo y la policía lograron desalojar el lugar.
