Tras más de 53 días de desabastecimiento de agua en el campamento Cuajone, Southern Perú reanudó la distribución del recurso hídrico a través de las redes de agua, retomó sus operaciones y progresivamente se van normalizando las actividades cotidianas en los centros poblados de Villa Cuajone y Villa Botiflaca.
No obstante, la compañía aún no concluye la reparación de los daños ocasionados por un grupo de pobladores de la comunidad Tumilaca, Pocata, Coscore y Tala en el vertedero de demasías del reservorio Viña Blanca. Efectuadas las evaluaciones en la zona, se logró determinar que entre el 18 y 22 de abril, el forado ocasionado por los manifestantes en el muro de concreto armado, generó una fuga de hasta 15,663 metros cúbicos de agua, equivalente a un caudal promedio de 46 litros por segundo de agua.
Como se recuerda, el corte de suministro de agua afectó a más de 5,000 pobladores (entre trabajadores y sus familiares) quienes habitan en el campamento, además de generar la paralización de las operaciones de la mina. Asimismo, perjudicó los servicios de atención del hospital de Cuajone y las labores presenciales en los tres colegios que funcionan en el campamento.
La empresa, además de reparar la válvula de agua, que también fue dañada, sometió a análisis químico las aguas a fin de garantizar su inocuidad antes de reanudar el flujo de abastecimiento hacia el campamento.
“Lamentamos que la población en nuestro campamento minero haya sido la más afectada por esta medida de fuerza. Invocamos a las autoridades a realizar los esfuerzos pertinentes para que situaciones como éstas no se repitan, dado que representan un perjuicio para miles de personas entre trabajadores, madres de familia, niños, jóvenes y, también, personas de la tercera edad”, sostuvo el vicepresidente de Finanzas de Southern Perú, Raúl Jacob.
OPERACIONES EN MARCHA
Respecto a las operaciones de planta concentradora, la compañía informó que éstas se reanudaron el viernes 22 de abril a las 10:00 de la noche, tras un diligente trabajo de los trabajadores para poner en marcha todo el sistema.
Cabe mencionar que, durante los 53 días de parada en planta concentradora, se realizaron trabajos de mantenimiento y ejecutaron pruebas de operatividad de los equipos principales, lo que permitió que la puesta en marcha tome aproximadamente 8 horas luego de la apertura de la válvula de Villa Blanca.
Tras reiniciarse la operación y hasta el 26 de abril último se ha transportado, a través de la vía férrea hacia fundición Ilo, 7,500 toneladas de cobre.
La empresa señaló que próximamente se iniciará una mesa de trabajo con las autoridades para solucionar la situación de conflicto propiciada contra Southern Perú y hallar mecanismos que fomenten una convivencia pacífica en la zona. Este clima de paz ha sido constante durante los 45 años de operación de la mina Cuajone en el distrito de Torata, en Moquegua.