Esta vez la presencia de la población moqueguana en las ferias fue más ordenada ante las medidas adoptadas por las autoridades, tanto municipales, Policía Nacional y el Ejército.

En esta oportunidad, no se dejó ingresar a las personas que no tenían puesta sus mascarillas, con la finalidad de prevenir el contagio del coronavirus.

La feria Santa Fortuna se vio abarrotada de gente, pero siempre bajo el control de la Policía Nacional, donde señalaron que la entrada era por la calle Balta y la salida por la calle Amazonas.

Algunos productos mantenían sus precios, mientras que en otros si se evidenció un incremento, pero mínimo.

Un representante de la Policía Nacional, indicó que esta semana, la población tomó mayor conciencia sobre las medidas de seguridad, asistiendo de forma ordenada a los centros de abastos.

En la feria de la Chacra a la Olla, que en esta ocasión se ubicó a lo largo del Malecón Ribereño, también se evidenció una concurrencia masiva de la población. Algunos precios eran elevados.