La gestión del Gobierno Regional de Arequipa no se lleva a cabo de la mejor manera debido a que hay una ausencia de proyectos de inversión pública y privada que han provocado la reducción de empleos en la región, así como la paralización de la producción agrícola y pérdida de clases en la provincia de Islay, sostuvo Cesar Lütgens, gerente general de la Cámara de Comercio e Industria de Arequipa (CCIA).

“La gestión regional no se lleva a cabo de la mejor manera, hay ausencia de proyectos, y la ciudadanía no tiene un norte claro a dónde apunta el Gobierno Regional en cuanto al desarrollo de proyectos que permitan la generación de empleo y el bienestar de la población. Eso de hecho es preocupante”, dijo.

Lütgens mencionó que la CCIA esperaba para este año un crecimiento económico del 3.8% en Arequipa, al lamentar que a tres meses de concluir el 2019 solo se alcanzará el 2.5%. “Es un análisis que hemos hecho en vista de que estamos culminando prácticamente el noveno mes del año y no vemos mayores resultados que nos permitan prever que esas cifras proyectadas puedan superar o igualar las cifras del año pasado”, indicó.

“Todos sabemos que la inversión es el principal motor del crecimiento. La inversión privada participa con un 80% mientras que la inversión pública con un 20%. Si nos remitimos a obtener cuánto es la inversión pública en Arequipa, nos damos con la sorpresa de que el gasto de capital del Gobierno Regional de Arequipa es de 29.8% cuando debería ser del 67%”, remarcó.

Advirtió que la paralización del proyecto Tía María ha afectado los aspectos económico y social en Arequipa. “La provincia de Islay está frenada en su desarrollo educativo, porque los escolares pierden 60 días de clases. Los mismos agricultores no pueden desarrollar sus actividades normalmente y hay riesgo de que sus cosechas se pierdan. De hecho, lo ocurrido en Tía María ha frenado todo el desarrollo económico”, indicó.

“En Arequipa el empleo se ha estancado, porque la generación de empleo se canaliza a través del crecimiento económico y este no puede bajar de un 4.5%. Arequipa ha venido creciendo exponencialmente hasta el 2017 y ayudó a generar empleo y a reducir la brecha de pobreza. El promedio nacional de pobreza es del 20% y Arequipa está con un 11% gracias a las inversiones y hoy día esa atracción de inversiones se ha frenado”, explicó.

Puntualizó también que el reinicio de Majes Siguas II se encuentra paralizado porque existe una controversia en cuanto a la firma de una adenda donde se considera un incremento en el costo del proyecto motivado por un cambio tecnológico sugerido por el concesionario. “Esto ya tiene mucho tiempo y es momento de dar un gatillazo para que el proyecto empiece. Es un proyecto agroexportador de primer nivel que tiene Arequipa. Arequipa tiene la gran oportunidad de desarrollarse en sectores económicos que no necesariamente tienen son la minería”, precisó.

“Las inversiones vienen cuando se entiende que un país brinda las condiciones adecuadas en cuanto a gobernabilidad, institucionalidad y respeto al Estado de Derecho, pero cuando existe incertidumbre es difícil de que las inversiones lleguen”, anotó.

Subrayó que Arequipa tiene la posibilidad de continuar creciendo económicamente si es que se destraban varios proyectos privados y públicos que se encuentran en compás de espera. “En cuanto a proyectos mineros que no son Tía María, tenemos hoy en día el proyecto Pampa de Pongo, Zafranal y Don Javier, que son proyectos de inversión sumamente importantes. Todo ello apunta a que Arequipa pueda continuar con la senda del crecimiento”, dijo.

GOBERNADOR REGIONAL DEBERÍA FOMENTAR INVERSIONES

Lütgens comentó que el gobernador regional de Arequipa, Elmer Cáceres Llica, debería fomentar las inversiones en la región, porque ha sido electo por la ciudadanía para que genere desarrollo y permita que Arequipa continúe en la senda del crecimiento y siga siendo la segunda ciudad más competitiva del país. “El gobernador debe reflexionar y velar por el desarrollo de la región en beneficio de quienes lo han elegido”, insistió.

“El tema confianza es fundamental. Un ejemplo es la gestión provincial a través del alcalde de la Municipalidad Provincial de Arequipa, que piensa en el desarrollo de la ciudad al continuar con proyectos. La cosa es diferente con nuestro gobernador, cuya ausencia se nota desde que se iniciaron los conflictos con Tía María. Creo que aún está a tiempo de recuperar la confianza, pero tiene que tomar decisiones y tiene que pensar en el bienestar de la población y no en réditos políticos”, comentó.

También expresó su confianza en la convivencia entre la minería y el agro al mencionar la experiencia del complejo minero Cerro Verde. “Un ejemplo es Cerro Verde. Hoy día la minería utiliza prácticas a través de la tecnología que hacen que esta industria sea sostenible porque trata de evitar todo tipo de contaminación”, dijo.

Destacó la necesidad de que deben dejarse de lado las pasiones y fomentar los espacios de diálogo. “El Ministerio de Energía y Minas ha convocado a los dirigentes para que expongan su preocupación. El Estado tiene la obligación de absolver todas las dudas que pueda tener la población. De Igual modo, la empresa minera también tiene la obligación de informar para evitar cualquier tipo de problemas con las comunidades aledañas al proyecto. También se debe escuchar las preocupaciones de la población”, precisó.