En un hecho histórico para la Iglesia Católica, el cardenal Robert Prevost ha sido elegido como el nuevo Sumo Pontífice, adoptando el nombre de Papa León XIV. En una entrevista, el padre de la ciudad de Moquegua, Edilberto Martínez, compartió su reflexión sobre esta significativa elección y el mensaje que el nuevo papa proyecta para la Iglesia y el mundo.
“Lo primero que rescato es que el Papa comienza con un mensaje de paz”, afirmó el párroco. “Será esta una de sus tareas fundamentales: buscar la paz en medio de la guerra que aflige al mundo”, agregó.
El sacerdote también destacó el enfoque del nuevo pontífice hacia una Iglesia sinodal, es decir, una Iglesia abierta, participativa y que sale al encuentro del otro. “Nos habla de tender puentes de diálogo, algo urgente no solo en el mundo, sino también aquí en Moquegua. Solo mediante el diálogo se logran consensos y se construye el bien común”, remarcó.
El nuevo Papa, nacido en Estados Unidos, pero con un largo camino pastoral en el norte del Perú, particularmente en zonas como Chulucanas, Trujillo y Chiclayo, ha estado profundamente marcado por la realidad de la pobreza y la violencia. “Eso le ha dado una gran sensibilidad social. Es un obispo incluyente, cercano a los pequeños y a todos, sin distinciones”, expresó Martínez.
Asimismo, el párroco moqueguano señaló que el estilo de vida del Papa León XIV ha sido siempre humilde, sobrio y cercano al pueblo, características que lo convierten en un líder espiritual con gran capacidad de escucha. “Si hay alguien que sabe escuchar pausadamente, con atención, es él. Tiene un carisma alegre y sencillo que, sin duda, aportará mucho bien a la humanidad y a la Iglesia”.
En su análisis final, el sacerdote enfatizó que el nuevo pontífice seguirá el legado de su homónimo, León XIII, con un enfoque pastoral orientado hacia la comunión, la justicia y el bien común, animando a la Iglesia a caminar con el mundo y con Dios.