El pasado jueves 9 de enero, alrededor de las 7:00 p.m., un grupo de personas, aparentemente pertenecientes a una agrupación religiosa proveniente de otra ciudad, realizó un retiro en la playa Pozo de Lisas.
Durante esta actividad, los participantes encendieron una fogata utilizando de manera irregular una plataforma de madera (parihuela) destinada a quitarse la arena tras salir del mar, causando su destrucción.
Los veraneantes que presenciaron el hecho expresaron su indignación y solicitaron a la Municipalidad Provincial de Ilo un mayor control en las playas, no solo para evitar la destrucción de bienes públicos, sino también para mantener la limpieza de estas áreas recreativas.
Jorge Álvarez Apaza, monitor ambiental, señaló que las personas involucradas no serían residentes de Ilo y que además dejaron desechos tras acampar en la playa. Álvarez afirmó que este tipo de incidentes refleja una falta de orden y autoridad en el balneario.
Asimismo, durante una reciente inspección en la playa Boca de Río, se identificó un problema similar, donde algunos visitantes encendieron fogatas y dejaron restos que ensuciaron la arena.
