POR: MSC. ARQ. GUSTAVO PUMA CÁCERES
En el anterior artículo se dio una propuesta con el fin de orientar una planificación sistémica de territorio con un esquema de trenes rápidos de pasajeros y mercancías para el Macrosistema Centro Sur proyectado al año 2050, donde se plantea la articulación de las regiones de Ica, Huancavelica, Ayacucho, Apurímac, Cusco y Madre de Dios.
En el artículo de hoy compartiremos la propuesta que nos hace llegar el MSc. Arq. Jan Romero Reaño sobre la implementación de una red de trenes en la macrorregión centro sur.
LA IMPORTANCIA DE ARTICULAR LA MACRORREGIÓN CENTRO SUR
La visión de un Perú más integrado y dinámico, con un desarrollo económico sostenido, pasa inevitablemente por la articulación de su territorio a través de una red eficiente de transporte. En este contexto, la propuesta de implementar una red de trenes de carga y pasajeros en la macrorregión centro sur del país surge como una solución clave para conectar industrias, dinamizar economías y potenciar la integración territorial.
DINAMIZACIÓN DE INDUSTRIAS Y ECONOMÍAS A ESCALA
La macrorregión centro sur del Perú, que abarca áreas desde la costa hasta la selva, posee un potencial económico vasto y diverso. Sin embargo, este potencial ha estado históricamente limitado por la falta de infraestructuras de transporte adecuadas. La propuesta de una red de trenes de carga y pasajeros busca superar este obstáculo, conectando eficientemente centros industriales, zonas agrícolas y mercados, tanto nacionales como internacionales.
Al unir regiones productivas como Ica, Ayacucho, Cusco y Apurímac con corredores logísticos hacia puertos y fronteras, se abre la puerta a una economía de escala más eficiente. Esto no solo reduce los costos de transporte, sino que también acelera el flujo de mercancías, facilita la movilidad de la mano de obra, y estimula la creación de nuevas oportunidades de negocio. En un mundo cada vez más globalizado, la capacidad de mover productos de manera rápida y económica se traduce en una mayor competitividad para los productores locales en mercados internacionales.
POTENCIALIZANDO LA INTEGRACIÓN TRANSVERSAL DEL TERRITORIO
Más allá de los beneficios económicos directos, la red de trenes propuesta tiene un impacto profundo en la cohesión territorial. Actualmente, la geografía andina del Perú representa un desafío significativo para la integración de sus regiones. La red de trenes no solo atraviesa longitudinalmente la costa, la sierra y la selva, sino que también establece conexiones transversales que vinculan áreas tradicionalmente aisladas, como es el caso de las conexiones entre Ayacucho y Huancavelica, o entre Cusco y Puerto Maldonado.
Esta integración transversal permite una mayor equidad en el desarrollo regional, garantizando que los beneficios del crecimiento económico no se concentren únicamente en las zonas costeras, sino que se distribuyan de manera más equitativa en toda la macrorregión. Además, facilita el acceso a servicios básicos, educación y salud en áreas remotas, mejorando así la calidad de vida de sus habitantes.
UN PASO DECISIVO HACIA EL FUTURO
La implementación de una red de trenes en la macrorregión centro sur no es solo una inversión en infraestructura, sino una apuesta estratégica por el futuro del país. Uniendo esfuerzos entre el sector público y privado, y con una visión a largo plazo, esta red de trenes podría convertirse en el eje vertebrador de una nueva era de desarrollo para el Perú.
Con una adecuada planificación y ejecución, la red de trenes de carga y pasajeros se posicionará como un motor clave para la dinamización de industrias, la creación de empleo, y la integración social y económica del país. En definitiva, un proyecto de esta envergadura transformará no solo el paisaje económico de la región, sino también la vida de millones de peruanos que anhelan un país más unido, próspero y justo.