La Central Sindical CGTP, el Sindicato Unificado de Trabajadores en Construcción Civil y el Sindicato de Trabajadores Obreros de la Municipalidad Provincial de Islay emitieron un pronunciamiento conjunto acerca de la grave contaminación de las aguas del río Tambo.
Según el documento, desde hace años y especialmente en las últimas semanas, se ha evidenciado una coloración rojiza, amarillenta y atípica del agua del Tambo, debido a la actividad de las mineras Aruntani y Cultinor en sus proyectos Florencia-Tucari y Katy, respectivamente.
Estos proyectos mineros vierten relaves a los ríos Coralaque, Margaritani y Titire, que son afluentes del río Tambo, el cual abastece de agua no solo a la actividad minera, sino también a la agricultura, ganadería y a la empresa Sedapar, que provee de agua a la provincia de Islay.
Las organizaciones sindicales denunciaron que, a pesar de las declaratorias de emergencia emitidas por sucesivos gobiernos en los últimos 10 años y las 21 sanciones impuestas por el OEFA a la minera Aruntani desde el 2011 por exceder los límites máximos permisibles de emisiones, no se ha logrado revertir la grave contaminación. Incluso, se han encontrado niveles de metales pesados como arsénico, boro, sodio, cadmio, cobre, zinc y hierro disuelto que sobrepasan en más del 200% los límites establecidos.