El presidente Francisco Sagasti se mostró a favor de iniciar un proceso de diálogo nacional en busca de un cambio en la Constitución, como pide un sector de la población que ha salido a las calles a protestar; sin embargo, aclaró que a su gestión solo le corresponde sentar las bases para este diálogo debido a que se trata de un gobierno de transición.

«Es tiempo de iniciar un proceso nacional de diálogo e inclusivo, abierto a todos, en lo que podrían ser las bases hacia el futuro de un cambio constitucional (…) A nosotros, como gobierno de transición y de emergencia, nos toca simplemente crear las condiciones para que esto suceda, no podemos, en un momento tan crítico, ir más allá. Enfocaremos todos nuestros esfuerzos para que el Gobierno que asuma encuentre un país en paz y ordenado», señaló.

Durante la ceremonia de conmemoración del Bicentenario de la Expedición Libertadora en Huaura, el jefe de Estado destacó su visita a esta ciudad se da «en un contexto de patriotismo activo» donde la población, especialmente los jóvenes, «han demostrado que están dispuestos a independizarse del autoritarismo, la corrupción y la mala política».

Asimismo, señaló que su Gobierno, al que llamó de transición y emergencia, «aspira dejar como legado la tranquilidad y una transición pacífica». Añadió que, pese a la falta de liderazgo político, las recientes manifestaciones ciudadanas «nos han demostrado que ese fermento renovador que siempre ha representado nuestra juventud sigue allí intacto».

«En esta Generación del Bicentenario la tarea es abrir el espacio (…) Administraremos temporalmente el capital social que hemos recuperado durante estas últimas semanas en las cuales la indignación de muchos ciudadanos ha logrado abrir nuevos espacios hacia futuro y trataremos que esto no sea solo una ilusión, sino que sea una realidad», apuntó.

Para Sagasti, las recientes protestas ciudadanas se dieron en rechazo a lo que la población consideró como «un proceso ilegítimo», en referencia a la vacancia presidencial. En ese sentido, señaló que su gobierno transitorio tiene la responsabilidad «de estar a la altura de los desafíos que enfrentamos en este crítico momento, uno de los más difíciles de nuestra historia».

«Estamos todos al tanto de lo que es la crisis de salud por la pandemia, la peor crisis económica que tenemos en más de un siglo, los problemas políticos. En estos ocho meses la tarea es enrumbar al país nuevamente, de tal forma que quien reciba legítimamente el Gobierno el 28 de julio de 2021 lo haga con plena legitimidad», señaló. [Fuente: RPP]