POR: MANUEL ACUÑA FORNO
GERENTE GENERAL DE APC CORPORACIÓN
Toda empresa que se preocupa por contribuir con el cambio de su país y participar de acciones que cambien el mundo en el que vivimos, incorpora dentro de sus políticas objetivos que a un mediano y largo plazo contribuyan con el desarrollo de su gente y genere réplicas positivas en su entorno.
A propósito del tema, cada vez son más las organizaciones y entidades que se suman a esta iniciativa de cambio. Por ejemplo, en el año 2015, líderes mundiales adoptaron un conjunto de 17 objetivos globales centrados en la lucha contra la pobreza, protección al planeta y contribución a la prosperidad como parte de una nueva agenda de desarrollo sostenible.
Respecto a ello, si deseamos profundizar en dichos objetivos, rescatando 3 de ellos como: “Trabajo decente y crecimiento económico”, “Producción y consumo responsable” e “Igualdad de género”, podemos ver que estos favorecen el crecimiento económico y abordan una serie de necesidades sociales, entre las que resaltan educación, salud, protección social y oportunidades de empleo, mientras que a su vez luchan contra el cambio climático promoviendo la protección del medio ambiente.
En el caso de “Trabajo decente” y crecimiento económico, aquí la importancia radica en darle la oportunidad a los propios colaboradores, y desde nuestro negocio principal también, a los pobladores que viven en las zonas de operación de nuestros clientes para capacitarlos, convertirlos en proveedores de servicios e integrarlos a nuestra cadena de valor mientras acceden a un trabajo digno. Sin dejar de lado, nuestro sentido de igualdad de género, que alienta el empoderamiento de la mujer como eje fundamental de la economía local para generar oportunidades de desarrollo y bienestar para ellas y sus familias.
Por otro lado, respecto al objetivo enfocado en “Producción y consumo Responsable”, aquí se resalta esta gran iniciativa por fomentar el uso eficiente de los recursos y la energía, así como la implementación de procedimientos e infraestructuras ecoamigables, que protejan el ambiente. Mientras que a través de la “Igualdad de género” rescatamos la iniciativa de promover la participación femenina en las diversas actividades económicas y dentro del mundo laboral mediante el desarrollo de sus capacidades y su autonomía.
Este contexto nos lleva a reflexionar sobre la importancia de comprometernos con estos objetivos y buscar la forma de sumar a nivel empresarial y personal. De esta forma, será mucho más fácil y efectivo que las futuras generaciones se integren a estas iniciativas y se logre un compromiso global.